Ya lo hemos visto otras veces y parece que es una tendencia que ha llegado para quedarse. Las grandes marcas ya no solo apuestan por modelos veinteañeras y sin ninguna (aparente) imperfección para sus catálogos, sino que el espectro se va abriendo para abarcar que muchas más mujeres se sientan identificadas con lo que ven. Vimos mujeres mayores de treinta el año pasado en el lookbook de Zara, vimos a una modelo de la talla L lucir lencería y ropa interior de Oysho y, en general, cada vez vemos menos retoque en las webs de Inditex.
Modelos mayores, con arrugas que lucen orgullosas, sin que haya un exceso de maquillaje ni de retoque fotográfico posterior. Pecas a la vista, sin que nadie se plantee ocultarlas. Todo ello podemos encontrarlo en la nueva colección de Zara... y no por casualidad. Desde la compañía gallega nos han confirmado que es una apuesta de Zara por «la belleza real, por las mujeres reales».
Y no solo se refieren a la casi ausencia de maquillaje o de retoque, sino también a la elección de modelos que sobrepasan la edad habitual en este tipo de catálogos. Desde Inditex, aluden al enorme espectro de edades que abarca la clienta de Zara y a la necesidad de que todas ellas se sientan representadas, no solo las veinteañeras. Nosotros nos quedamos con que estas fotos con un rollo alucinante: una nueva forma de hacer moda y de vender moda.
Imágenes | Zara.
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