Ha sido mi aliada estas fiestas. Os presento la mascarilla flash Cure Solutions de Yves Rocher, una mascarilla que en sólo cinco minutos te da como dice su nombre, un flash de luz. Debería haber compartido la experiencia antes con vosotras, pero no he tenido tiempo...
El tubo tiene 50 ml de un líquido viscoso anaranjado que se extiende de una manera muy sencilla. Abres y vas aplicando sobre el rostro como si te dieras crema, pero dejando una pequeña capa en la piel. No queda rígido, que era miedo al ser mascarilla, puedes seguir hablando y haciendo todo normal. Es un pringue y ya.
A los cinco minutos te la quitas con agua templada, y la piel queda suave, mucho, y como con luz. Yo lo notaba sobre todo en las mejillas, que tenían un tono mucho mejor. De hecho, casi todos los miembros de mi familia pueden dar fé de lo fácil que es su aplicación, porque tanto en Nochebuena como en Nochevieja, a cada un que pillaba por el pasillo, le daba rápidamente un poquito. Y en todos he visto el mismo efecto: mejillas sonrosadas y menos brillos. Y os hablo de chicos y hombres, que no se ha librado nadie.
Llevo usándola todos los días de las fiestas, esta semana es casi de descanso, pero ha sido una aplicación ya de rutina. Piel más suave, sí, pero no noto tanto la luz como las veces que la he usado de manera puntual, sobre todo los primeros días. La suavidad sí, eso se nota al primer tacto.
Os dejo la recomendación que hay que reponerse con elegancia y seguir arrebatadoras cada día. Además, ahora en rebajas está casi a la mitad de precio, 13.90 euros.
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