Uno de los ingredientes más versátiles, ricos y saludables que encontramos en el mundo culinario es el calabacín. Con un sinfín de recetas fáciles y sanas de hacer, este ingrediente nos soluciona cualquier cena (ya sea de verano u otoño). Con el tiempo ha demostrado que nos puede sacar de cualquier apuro y hoy nos solucionará -de nuevo- nuestra cena.
Apostando por una fórmula rápida, barata y saludable, hoy cocinaremos un pastel de calabacín en microondas. Evitando el calor que produce el encender el horno, este truco nos ahorrará también limpieza. Además de ser fácil y rápido, este pastel de calabacín en microondas es muy atemporal ya que se puede comer frío, tibio o caliente. Jugoso y refrescante, es una opción perfecta para probar estos días de calor (aunque sean pasados por agua).
Entre sus ingredientes, además de calabacín, lleva queso y ciertos elementos que ayudan a darle estructura como es la leche, los huevos o la harina -si somos celíacos habría que cambiar la harina-. La elección del queso va al gusto de cada uno, aunque aconsejamos uno que tenga sabor y que funda bien. Evitaríamos quesos frescos o tiernos con mucha agua ya que el calabacín y los líquidos hidratan bastante la receta.
Más allá de laminar finamente el calabacín, la receta no tiene mucho más secreto. Si tenemos mandolina será mejor (y nos ahorraremos mucho tiempo); si no, un poquito de paciencia y un cuchillo bien afilado lograremos rebanadas perfectas. Para que este plato que delicioso, cocinaremos primero el calabacín para que quede tierno, mientras que por otro lado batiremos la leche con los huevos y la harina.
Después escurriremos el calabacín y, a partir de ahí, montaremos el pastel de calabacín al microondas. En una fuente de horno pondremos una capa de mantequilla, verteremos la mezcla y añadiremos queso rallado. Una vez listo, pondremos las láminas de calabacín y lo cocinaremos durante 15 minutos. Una vez listo se recomienda dejarlo reposar para que se enfríe y sea más fácil de desmoldar. A modo de guarnición siempre podemos optar por una sencilla ensalada verde o un aliño extra hecho a base de mostaza, vinagreta o mayonesa.
Como guarnición, una ensalada verde o directamente algún aliño extra con una mostaza, una mayonesa o una vinagreta serán perfectos para redondear la jugada.
Foto | Max Griss, Directo al paladar
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